Llenas tu boca de palabras (mentiras), pues el miedo a enfrentar la realidad consume tu cordura.

 Actúas como si fuera cierto, pero tu mirada esta perdida sabiendo que vives una vida que no es tuya.

 Te escucho hablar y tus miedos me rozan la piel. Se acercan en forma de suaves caricias, y me dejo seducir, me interno en tu locura, pero es tanto mi temor a temer, que me alejo.

 Permanezco a tu lado, pero sin ser parte tuya.

 Observo silenciosa como esta triste comedia se desmorona. Observo y callo, porque decir algo esta de sobra, pues sabes tan bien como yo que tu andar erratico solo atraerá más dolor.


 Por un momento creí ser inmune a tu demencia, pero huyo con pavor cada vez que te tengo cerca. Somos uno, divididos por el tiempo. Soy tú, sin querer serlo.